Vinicius, renovación sí o sí
En el Madrid tienen claro que el brasileño es patrimonio del club y el jugador sabe que su sitio está en el Bernabéu. La firma está encaminada.
Los dirigentes del Real Madrid consideran a Vinicius patrimonio del club. No tienen duda alguna, pero tampoco del hecho de que el club está por encima de cualquier futbolista, algo que asume el brasileño desde el inicio de las ya largas conversaciones, que se remontan a nueve meses atrás. Sobre la mesa desde hace tiempo la ampliación de ese vínculo que finaliza dentro de temporada y media, pero siempre sabiendo las directrices marcadas que la entidad establece con todos los jugadores, algo que ha quedado demostrado en los últimos años.
El ruido de las semanas precedentes y el que siempre suele acompañar a Vinicius viaja por otra ruta en este entendimiento. Además, los diez días del brasileño con su selección y con el manto de Carlo Ancelotti a manera de protección, ha vuelto a actuar de bálsamo ideal en este tipo de situaciones. El clima creado a raíz del ya famoso cambio en el Clásico no se ha cruzado en las reuniones-charlas mantenidas en las semanas precedentes. Cierto es que lo sucedido en el Real Madrid-Barcelona encogió un poco el estómago a todo el madridismo, pero Xabi Alonso y el delantero hablaron para aclarar posiciones. En el club aplaudieron la solución encontrada para la convivencia entre técnico y jugador.
Tal y como informó este periódico, el laberinto en el que se metió el desenlace de la renovación después del Mundial de Clubes desapareció en las últimas semanas por el deseo de las dos partes. Vinicius sabe que su sitio está en el Real Madrid, algo que va mucho más allá de momentos puntuales y de ese carácter que aparece cuando el delantero está a tope de pulsaciones. La semana junto a sus compañeros de selección ha servido para reforzar la autoestima del delantero y para minimizar por completo lo vivido. Cierto es que en Brasil, Vinicius luce mejor cara.
Tanto el entorno del jugador como los dirigentes del club blanco entienden que con un acuerdo los rumores llegarían a su fin y aparecería en escena una etapa de estabilidad y tranquilidad, con el propio futbolista, el equipo y el club como beneficiados, en lo deportivo, social y económico. El acuerdo despejaría dudas y abriría un nuevo horizonte que descartaría por completo aquello de llegar al último año de contrato sin renovar, algo a lo que el Real Madrid no está acostumbrado con los jugadores franquicia como es el caso del ex del Flamengo.
Vinicius jamás ha puesto condición deportiva alguna, más allá de tener sus preferencias por dónde moverse. Ha recuperado sensaciones y su juego vuelve a fluir sobre el terreno de juego. Sabe que está en el sitio idóneo para seguir adelante con su carrera, pese a que muchos equipos estén pendientes de lo que sucede.
El entendimiento con sus compañeros en el Real Madrid no ha sufrido alteración alguna. Saben lo que puede dar y también conocen su personalidad. El gesto de pedir perdón al vestuario ha gustado y, aunque nunca han dudado de él y de su compromiso, es algo que suma y ha sido apreciado por el grupo. El aficionado le perdonó de manera pública y notoria y por Valdebebas, tan felices.
