El Barça no le gana a los grandes
El equipo de Flick ya ha perdido contra el PSG, el Madrid y el Chelsea. El curso pasado goleó al Bayern en la Champions y a los blancos en el Bernabéu.
La realidad es que, en el tercer partido más exigente del curso, el equipo volvió a fallar. Esta temporada, el Barça ha sido incapaz de ganar a ninguno de los grandes. Perdió a principios de octubre en casa ante el PSG por 1-2, a finales de ese mes cayó en el Clásico por idéntico resultado y ahora, cuando ya llegamos a finales de noviembre, el equipo salió goleado ante el Chelsea por 3 a 0, eso sí, jugando muchos minutos con un futbolista menos por la expulsión de Araújo.
La temporada pasada, por ejemplo, en el mes de octubre jugó consecutivamente contra el Bayern de Múnich y el Real Madrid. En un partido donde los de Flick estuvieron muy efectivos, golearon a los alemanes por 4 a 1 en el Lluís Companys el 23 de octubre y apenas tres días más tarde le endosaron un 0 a 4 a los blancos en el Bernabéu.
Las cifras de las tres derrotas
El Barcelona ha perdido ante los grandes esta temporada por deméritos propios, siendo inferior claramente a su rival. Los números no engañan. El PSG lo superó en ocasiones claras, cinco contra tres, en remates totales, 16 a 12, en remates entre los tres palos, siete a tres, mandó un balón al palo y mientras que Szczesny tuvo que hacer cinco paradas, el del PSG, Chevalier, no hizo ninguna.
En el Clásico, más de lo mismo. El Madrid tuvo cuatro ocasiones claras por dos el Barcelona, en remates totales fueron 23 a 15 y entre los tres palos la cifra fue de 10 a 6. Szczensy realizó nueve paradas (fue uno de los mejores del partido) mientras que Courtois intervino decisivamente en solo cuatro ocasiones.
En Stamford Bridge, el Chelsea fue mejor once contra once y también con superioridad. Los de Maresca remataron 15 veces por cinco los de Flick, seis disparos de los londinenses fueron entre los tres palos por solo dos de los azulgrana. Al Chelsea, además, le anularon tres goles.
En todos los partidos, además, los rivales superaron al Barcelona en intensidad y ritmo, demostrando que el equipo azulgrana todavía no ha conseguido la plenitud física de todos sus jugadores, en parte por culpa de las muchas lesiones que han afectado al equipo y que jugadores capitales no están todavía a su mejor nivel.
