Argentinos deciden no hablar más con la prensa: "Muchas acusaciones y falta de respeto"
Messi condujo en la cancha y también afuera: habló tres minutos, acompañado por todo el plantel, y comunicó que por ahora no hablarán con la prensa: "La acusación al Pocho es muy grave. Si no la cortábamos ahora...".
Olé
Apenas tres minutos duró el monólogo. Después de que diera la cara después del 0-3 con Brasil, Messi se hizo cargó y agarró el micrófono en la corta conferencia. Y confirmó lo que se venía rumoreando desde el mediodía, que los jugadores ahora harán silenzio stampa. Es decir, no más declaraciones públicas a la prensa, en definitiva a la gente.
"Hola buenas noches, perdón pero es chiquito esto. Preferimos mirar la cara antes de dar un comunicado. Como ya saben, porque acá se sabe todo, estamos comunicándoles que no hablaremos más con la prensa, obviamente ustedes deben saben por qué. Recibimos muchas acusaciones y faltas de respeto y nunca dijimos nada. Pero esto sobrepasa todo. La acusación al Pocho (Lavezzi) es muy grave y si no salimos a decir nada se cree que es así”.
Los jugadores venían cansados de las críticas y la gota que los hizo explotar fue un tuit del periodista Gabrel Anelllo, de Radio Mitre, dando a entender que Lavezzi había quedado afuera del banco por fumar un porrro. “Preferimos cortar esto de una vez. Lamentamos mucho que tenga que ser así, pero no nos queda otra. Sabemos que muchos de ustedes no están en ese juego de faltarnos el respeto, podés perder, ganar, jugar bien o mal, pero meterse en la vida de uno… Si no la cortábamos hoy no lo cortábamos más. Es muy grave y estamos acá, y no vamos a entrar en el juego ése. Nos van a seguir diciendo un millón de cosas. Queda dicho. Un millón de gracias”.
Estuvieron todos rodeando a Messi, como en viejos tiempo. Menos belicoso que en aquél 1998 con Passarella, pero silenzio stampa al fin. Mascherano secundando a Leo, y ahí al lado también Lavezzi. Fue breve el comunicado, y claro. Había bronca acumulada, hubo descarga por el 3-0, y habrá que ver hasta cuándo lo mantendrán.
Apenas tres minutos duró el monólogo. Después de que diera la cara después del 0-3 con Brasil, Messi se hizo cargó y agarró el micrófono en la corta conferencia. Y confirmó lo que se venía rumoreando desde el mediodía, que los jugadores ahora harán silenzio stampa. Es decir, no más declaraciones públicas a la prensa, en definitiva a la gente.
"Hola buenas noches, perdón pero es chiquito esto. Preferimos mirar la cara antes de dar un comunicado. Como ya saben, porque acá se sabe todo, estamos comunicándoles que no hablaremos más con la prensa, obviamente ustedes deben saben por qué. Recibimos muchas acusaciones y faltas de respeto y nunca dijimos nada. Pero esto sobrepasa todo. La acusación al Pocho (Lavezzi) es muy grave y si no salimos a decir nada se cree que es así”.
Los jugadores venían cansados de las críticas y la gota que los hizo explotar fue un tuit del periodista Gabrel Anelllo, de Radio Mitre, dando a entender que Lavezzi había quedado afuera del banco por fumar un porrro. “Preferimos cortar esto de una vez. Lamentamos mucho que tenga que ser así, pero no nos queda otra. Sabemos que muchos de ustedes no están en ese juego de faltarnos el respeto, podés perder, ganar, jugar bien o mal, pero meterse en la vida de uno… Si no la cortábamos hoy no lo cortábamos más. Es muy grave y estamos acá, y no vamos a entrar en el juego ése. Nos van a seguir diciendo un millón de cosas. Queda dicho. Un millón de gracias”.
Estuvieron todos rodeando a Messi, como en viejos tiempo. Menos belicoso que en aquél 1998 con Passarella, pero silenzio stampa al fin. Mascherano secundando a Leo, y ahí al lado también Lavezzi. Fue breve el comunicado, y claro. Había bronca acumulada, hubo descarga por el 3-0, y habrá que ver hasta cuándo lo mantendrán.
